martes, septiembre 27, 2011

Alerta

Soy cautivo de los estribillos sencillos.
De los más bobos.
De los más cortos.
Son bien eficaces.
Y yo usualmente sucumbo ante ellos.

No importa si es rock, reggae, o vil pop.
Siempre se me quedan martillando en la cabeza.
Pasó con Amaral.

Ale ale…
Ale ale alerta…

Una princesa dormida en un castillo vacío
Al despertar se dio cuenta que esta fuera de sitio
En medio de la ciudad anda arrastrando su traje
Las joyas de su corona no sirven para este viaje.

Ale ale…
Ale ale alerta
Cuando camina, niña perdida.

Una princesa dormida… en un castillo vacío.
Al despierto comprendió que era rodar su destino.
Su reino por un amigo que le acompañe esta noche
¿Que pronunciara al oído las silabas de su nombre

Ale ale…
Ale ale alerta
Cuando camina, niña perdida.

Se me quedó el coro de esa rola.
Es triste y pegajosa.
Llevo días con ella en la cabeza.
Quizá porque recordé a alguien por esta canción.




miércoles, septiembre 07, 2011

Recuerdos pésimos de un cumpleañero

Okey...
Creo que no es ningún secreto que no tenga el mejor de los días hoy, a pesar de que es mi cumpleaños.
No soy precisamente un fanático ni de las fiestas ni de las celebraciones (cuando en mi caso se trata). Por eso subí a Facebook las 10 razones por las que no me gusta celebrar mi cumpleaños, desde desperfectos hasta hechos tragicómicos.

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #1Que mis padres se desvivieran con una pachangona (piñata, globos, pastelote, aguinaldos) y puro marro llegara sin regalo al cumpleaños. Yo siempre me paraba en la puerta a exigir el regalo. Con la pena, no entran sin un detallito, ¡mínimo un roperazo!

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #2Que armaran pachanga temática y me vistieran de Batman. ¡Y encima me pusieran de fondo musical para la gran entrada del cumpleañero.! Ya saben, la rola clásica de “Tara ra ra ra ra ¡Batman! ¡Batmaaaan!” (En privado era divertido usar mallas y máscara, frente a todos los invitados no.)

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #3Que, encima de todos los traumas de cumpleaños pasados, insistan en armar pachangas familiares para “celebrarte”. Y lleguen tus tíos, tus vecinos, el primo segundo, el pariente y exactamente T-O-D-A la gente a la que no quieres ver.

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #4Que te digan que armes algo en el antro y salgan con “¡Que cada quién paga su cuenta! ¿no?”, y te dejen botado, olvidado, muy pedo y pagando, por supuesto, cuentas ajenas.

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #5Que las sorpresas nunca funcionan. ¡Nunca! Por eso odio las sorpresas. O adviertes que va a ser fiesta y luego tengas que fingir: “Nunca me lo imagine, ¡neto weeee!”.

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #6Que arranques en tu depa una fiesta en jueves. Lleguen como 80 extraños. Y despiertes en domingo, por cierto, crudísimo y en Casitas, Veracruz (dos días después y sin un maldito peso para el regreso).

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #7Que te atasquen de pastel en la jeta. Año, tras año, tras año… parece que la gente se luce por estropear el pastel, tirarlo, embarrártelo o mínimo buscar que te asfixies con una avalancha inversa de merengue y pan. Lo peor de todo es que es muy divertido cuando no eres el cumpleañero.

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #8Que te armen una pachanga en una casa con jardín y llueva a cántaros (y encima la lona tenga una falla técnica). No daré más detalles.

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #9Que te inviten a desayunar en VIPS… donde el cumpleañero come gratis.

Recuerdos pésimos de un cumpleañero #10Que mamá se despidiera de mí en mi cumpleaños. Murió casi un mes después.