lunes, diciembre 12, 2005

ERDI #3

Me lo encontré en EL UNIVERSAL ON LINE
¿Qué se obtiene de la mezcla de la danza de concheros, muchos litros de bacacho y todo el fervor vertido el día de la Virgencita de Guadalupe? Una peda de pocamadre ¿no? Bueno, quizá eso pensó un danzante que murió en pleno atrio de la Basílica de Guadalupe después de litros y bailes. Madres, pobre, David Jiménez Mendoza, de 22 años de edad, danzó durante horas con un grupo de los conocidos concheros, y al mismo tiempo le inflaba con singular gusto al ron blanco de conocida marca del murcielaguito. Pues resulta que el compadre conchero -en paz descanse-bebió ron blanco hasta embriagarse y después volvió a bailar. Sopas, entró en paro cardiaco. Ni la Virgencita ni San Juan Diego aparecieron en su ayuda.
La foto es obra de Luis García Soto, fotografo de EL UNIVERSAL, que espero no me demande por subir su material a mi arbitrio.

No hay comentarios.: