domingo, agosto 12, 2007

Por mi pobre puerco

Should I choose a noble occupation
If I did I'd only show up late and
Sick and they would stare at me with hatred
Plus my only natural talent's wasted on my alcoholic friends
My alcoholic friends / The Dresden Dolls



Cerveza +
Tequila +
Vodka +
Champagne
_________
Bomba

La madrugada del sábado lo entendió mi cuerpo.
No mezclar alcohol.
No por favor.
Eso me rogó en la mañana de ayer a través de pequeños mensajes dejados en mis articulaciones, estomago y cabeza.
Viernes por la noche, borrachera en el Sweet.
Antro nuevo en plena avenida Zavaleta.
Madre santa… terminé hasta las chanclas.
Sí, por la combinación antes citada. Al otro día hasta un cuadripléjico tendría mayores sensaciones en su cuerpo.
La verdad es que la manera en que ingiero alcohol comienza a hacerme pensar en que no puedo controlarlo.
Y no sé si empiezo con el método de los diez pasos o corro a mi centro AA de confianza… bueno, aún no tengo uno.
Chin, la bronca está en que he estado pensando en porqué no controlo el modo de beber. No me pasa seguido, pero la culpa después de una borrachera me la traen los dolores que sufre el pobrecito de mi cuerpo.
Se queja, y sí, soy un desastre en mis hábitos.
Antes comía cuando me acordaba y en la oficina se me iban las manos a tundir teclas y después, si mi tripa crujía, acudía por una sanísima torta de Doña Lupita (un gusto divino).
En fin.
Hace un rato le paré a las tortas.
Intenté decirle adiós al refresco. Comencé a comer más pescado. Y pues he comido ya más a mis horas. He dejado de cenar, pero de vez en cuando me gana el ansia y corro a los tacos de carne asada. Me he intentado controlar, lo juro.
De hecho solamente la semana pasada los tacos del Güero me hicieron caer en la tentación.
La coca de plano no la pude dejar.
Ahora quiero regularme en el alcohol. Más de una borrachera a la semana no está permitida. Le diré adiós al tequila derecho y con limón… comenzaré a tomarme un trago por salida.
Y nada más… Vaya copearé…
No prometo dejarlo en la próxima salida.
Digo, ¡vamos por pasos!
En fin. ¿Qué más haré por el pobre de mi cuerpo? Y lo escribo aquí para quede comprometido.
No sé. Por lo pronto seguiré comiendo a mis horas, y no cenaré en esta semana, ah, también prometo que solamente me tomaré una Coca-cola.
Ese será mi mayor destrampe.
Será un trato por puerco, digo, mi cuerpo.

No hay comentarios.: