lunes, abril 03, 2006

Mala nueva

Falleció la tía Leonor.
Un día se le enfrió el brazo, fue al doctor y le dijeron que no era nada.
Al otro día se enfrió todita ella.
Paro cardiaco dijo el doctor, sus hermanos no lo creyeron tras la calaña de marido que tenía.
Hace unos años que se había mudado con aquél gañan allá a León, Guanajuato.
Mi hermana me contó todo.
Camino a Huauchinango fue que me llegó el mensaje de Miriam contando qué pasó con aquella señora que algún día hizo los mejores molotes de la colonia Azteca.
El cuerpo lo trasladaron a Necaxa desde el viernes en la noche. Para el medio día del sábado lo estaban enterrando.
Y estuvieron todos los Velázquez Bonilla.
Todos menos unos.
Mi papá.
Ambos estábamos sanos y salvos en su fortaleza de hierba.

No hay comentarios.: